“Hemos entendido que este es un tema transversal que afecta a toda la sociedad, por lo que estamos apuntando a organizar esta medida por un bien común”, declaró Enríquez. Asimismo, confirmó que las pruebas comenzarán el próximo martes, una vez que las balanzas de pesaje lleguen al lugar este lunes.

El gerente explicó el procedimiento que se implementará: “Habilitaremos una fila única para los vehículos pesados. Estos pasarán por la balanza para verificar su peso y, si cumplen con los límites establecidos, podrán continuar para utilizar los pontones. Los vehículos con sobrepeso serán identificados, y su placa registrada, para dirigirse a un sector cercano donde deberán descargar el exceso”.

Para garantizar la organización del flujo vehicular, el transporte fluvial designará a cuatro personas responsables de coordinar las operaciones, mientras que la Policía Boliviana colaborará con entre dos y cuatro oficiales, dependiendo de la situación. Además, Enríquez señaló que “la Fuerza Naval también participará activamente para asegurar el correcto funcionamiento del sistema”.

Por otro lado, la ABC continúa realizando gestiones con la empresa encargada de la conservación vial para mejorar los accesos en el sector.

“Estamos trabajando para que el transporte pesado y la población en general no enfrenten problemas de infraestructura en esta área tan crítica”, concluyó.