El fenómeno ha causado la destrucción de caminos, pérdida de cultivos y la muerte de un bebé de ocho meses por el aumento repentino del río Piquendo.

Las comunidades más afectadas incluyen Nuevo Mundo, Villa Montes, Villa Paraíso, Huancané, Troncal Suapi, Santa Elena, San Pedro de Condo, Collasuyo, Villa Camacho, Puerto Linares, entre otras. En estas zonas, los derrumbes y caídas de plataformas han bloqueado el acceso, impidiendo la salida de productos agrícolas.

El impacto en la producción ha sido significativo, en el distrito 2, la central Litoral ha perdido 263 hectáreas de cultivos de papaya, cítricos, banano, yuca, arroz y cacao, en el distrito 3, la central Troncal Suapi ha registrado la pérdida de 63 hectáreas de cultivos. Además, fuertes vientos han destruido techos de viviendas en varias comunidades.

Las autoridades locales han solicitado ayuda urgente para la rehabilitación de caminos, asistencia humanitaria y apoyo para las familias damnificadas. Se espera la intervención de instituciones gubernamentales para mitigar los efectos del desastre.

La población de Alto Beni enfrenta una crisis humanitaria, con comunidades incomunicadas y pérdidas agrícolas que afectan la economía local. La emergencia continúa mientras las lluvias persisten en la región.