La emergencia fue atendida con la mayor diligencia, utilizando dos vehículos especializados: el Carro Bomba L-3 y la camioneta con la sigla B-1.

Al llegar al lugar, el equipo de bomberos observó un incendio que afectaba aproximadamente 10,000 metros cuadrados de vegetación. Inmediatamente, se procedió a la utilización de equipos de protección personal, mochilas bomba, batefuegos, rastrillos y otros equipos especializados.

Con una línea de ataque bien organizada, lograron combatir el fuego utilizando aproximadamente 7,000 litros de agua, logrando la extinción completa del incendio alrededor de las 19:10 horas.

El incendio provocó significativos daños a la flora y fauna local, afectando el medio ambiente y la salud de las personas debido a la emanación de humo. Además, representó un riesgo considerable para los conductores de vehículos livianos y pesados que transitaban por la carretera. A pesar del éxito en la extinción del fuego, se reportaron daños en el equipo utilizado, incluyendo la rotura de dos batefuegos.

Los bomberos de la Policía continúan desempeñando una labor crucial en la lucha contra los incendios forestales, especialmente en este periodo seco en el que se han incrementado los focos de calor. Estos incendios no solo generan contaminación, sino que también representan una amenaza directa para las comunidades y centros urbanos.