El director de Comunicación del Gobierno Municipal de Trinidad, Sebastián Murillo, expresó que esta actividad representa "una expresión cultural muy significativa" para el pueblo trinitario.

"Son 214 años desde la primera revolución indígena en Bolivia, una revolución donde nuestro héroe, Pedro Ignacio Muiba, llevó a cabo una hazaña histórica. Tenemos que recuperar y entender que la cultura moxeña es indomable y debe seguir siendo indomable", enfatizó.

Murillo también instó al pueblo a "jugar un rol activo en el desarrollo del departamento y del municipio, así como en la defensa de su cultura".

Bajo el cielo estrellado, decenas de trinitarios se congregaron en el monumento, lugar emblemático que simboliza la lucha y resistencia del pueblo moxeño. Estudiantes y docentes del Instituto interpretaron piezas cuidadosamente seleccionadas para reflejar el espíritu de libertad y dignidad de Muiba.

Moisés Nuni Yaca, rector del mencionado Instituto, recordó la relevancia de esta tradición iniciada en 2010 en honor a la herencia cultural moxeña.

“Continuamos esta herencia cultural, dando homenaje a nuestros mártires de la revolución mojeña de 1810, a la cabeza de nuestro héroe nacional Pedro Ignacio Muiba, José Bopi y todos los que defendieron nuestra estirpe moxeña,” expresó, subrayando el valor histórico y cultural de este tributo anual.

A su turno, Rudolh Argandoña, director de Patrimonio, Arte y Cultura de la Alcaldía de Trinidad, destacó la importancia de este homenaje.

"Para los mojeños y benianos, esta es una gesta inigualable en Latinoamérica, donde los indígenas se levantaron para establecer un gobierno autónomo propio", afirmó Argandoña, resaltando la valentía de esta lucha en pro de la autonomía y libertad indígena.