“Los cambios apuntan a vincular la enseñanza con las exigencias del mercado laboral contemporáneo, tanto a nivel nacional como internacional”, afirmó García.

La autoridad explicó que actualmente el equipo técnico del Ministerio de Educación trabaja en la elaboración de la normativa que regirá el calendario escolar 2026, documento que establecerá el cómputo oficial de los días de clase, así como las fechas de los descansos pedagógicos.

Este reglamento será presentado y difundido de manera oficial el próximo 2 de enero, para conocimiento de padres de familia, maestros y estudiantes.

Más allá del inicio de clases, la ministra García anunció que a partir de febrero se instalarán mesas técnicas de trabajo para revisar de manera profunda la Ley Avelino Siñani–Elizardo Pérez.

En este proceso participarán representantes del magisterio urbano y rural, organizaciones sociales y pueblos originarios, con el objetivo de adecuar la normativa a las necesidades actuales del sistema educativo.

La revisión responde a observaciones realizadas por diversos sectores académicos, que cuestionan la carga ideológica y el desfase de contenidos en las materias troncales.

En ese marco, el plan de reforma contempla la implementación de un nuevo modelo curricular que priorice la calidad educativa, la actualización de conocimientos y una formación más acorde a los desafíos del contexto actual.

Finalmente, la ministra señaló que el Gobierno busca modernizar el sistema de aprendizaje e incorporar mecanismos de medición que permitan evaluar de forma objetiva el rendimiento real de los estudiantes en todo el territorio nacional, fortaleciendo así la educación boliviana de cara al futuro.