El campeonato de expromociones del Christa McAuliffe celebró una nueva jornada, reuniendo a antiguos estudiantes que se encuentran cada fin de semana para rememorar anécdotas y fortalecer la amistad.

Este torneo no solo es una competencia deportiva, sino un espacio de encuentro que reafirma los lazos de camaradería entre generaciones.

Sebastián Murillo, integrante de la promoción 2013 del Christa McAuliffe, destacó que el torneo se desarrolla en un ambiente ideal para la confraternización.

“Cuando uno sale de promoción, generalmente los caminos se separan, pero estos espacios deportivos permiten volver a reunirse. Eso es lo que valoro del Christa McAuliffe”, comentó.

En la competencia, la promoción de Murillo se encuentra en tercer lugar, con la mira puesta en las primeras posiciones.

“Estamos decididos a continuar en el camino de las victorias para alcanzar las semifinales y, si es posible, luchar por el título”, afirmó. Con cada partido, los ex alumnos no solo buscan la gloria deportiva, sino también revivir los buenos tiempos vividos.

El Christa McAuliffe no solo se destaca por formar futuros profesionales, sino también por crear un entorno que fomenta la convivencia y el voluntariado.

“Además de la fiesta, hay diversas actividades para motivar a los más jóvenes”, concluyó Murillo. Este torneo es, sin duda, una celebración de la amistad y el espíritu de comunidad que perdura más allá de los años.