Su nombre es un homenaje al astro brasileño Neymar, y su historia futbolística comenzó a los tres años, formándose en la Escuela de Fútbol Villa Real Sociedad, donde ha desarrollado una técnica depurada, inteligencia táctica y un gran dominio del balón. Gracias a esas cualidades, fue convocado por el profesor Rufino Montenegro, quien lo incluyó en la selección Sub-15 tras seguir de cerca su desempeño.

“Salir campeón con Beni significa mucho para mí, tanto en lo personal como para el departamento, porque demuestra que aquí también hay talento”, expresó Aguilera, quien jugó de lateral derecho con el dorsal 2. El joven jugador recordó que el partido más complicado fue la final frente a Santa Cruz, por la intensidad y el nivel del rival.

“Cuando el árbitro pitó el final sentí una alegría inmensa y agradecí a Dios, porque cuando uno pone de su parte, Él también ayuda. Como dice su palabra: ‘Esfuérzate y sé valiente’”, añadió.

Con humildad, dedicó el título a sus padres, especialmente a su padre Roberto Aguilera, quien además es su mentor, y al entrenador Montenegro, por su guía constante.

“La enseñanza que me deja este campeonato es que hay que trabajar duro, no para ser mejor que los demás, sino para superarte a ti mismo. Mis metas son seguir creciendo futbolísticamente y seguir creyendo en Dios”, afirmó.

Finalmente, envió un mensaje a los niños y jóvenes: “Que se esfuercen, que no se conformen nunca y que luchen por sus sueños, porque al final, Dios recompensa cada esfuerzo y sacrificio”.