El representante indígena señaló que las precipitaciones intensas han provocado el desborde de varios ríos en la región, ocasionando pérdidas en viviendas, cultivos y ganado.

A pesar de que se ha registrado el ingreso de algo de asistencia, Áñez afirmó que esta ha sido insuficiente para cubrir las necesidades de los afectados, en especial de los niños, quienes requieren atención médica urgente.

Áñez hizo un llamado público al gobierno departamental, al gobierno nacional y a organismos internacionales para que refuercen el envío de alimentos, medicinas y otros insumos básicos.

"Va a pasar esta inundación, pero la afectación es lo que queda. Baja el agua y queda el sedimento.”, afirmó, al referirse a la pérdida de cultivos y el daño estructural a viviendas e infraestructura comunitaria.

El asambleísta indicó que los pueblos indígenas están organizados a través del Gran Consejo Chimán, instancia que cuenta con un directorio encargado de canalizar y coordinar la recepción de ayuda humanitaria.

Destacó que esta organización mantiene gestiones con diferentes niveles de gobierno en busca de soluciones inmediatas.

Finalmente, reiteró su pedido de solidaridad al pueblo beniano y boliviano, recordando que la recuperación de estas comunidades tomará tiempo y dependerá del apoyo concreto que puedan recibir en los próximos días.