Esta situación ha imposibilitado la realización de actividades físicas y la exposición al aire libre, lo que llevó a tomar esta decisión.

“El cambio de modalidad se da para el trabajo pedagógico”, señaló Roca, agregando que los directores de las unidades educativas deberán ejercer un control riguroso para asegurar que los maestros cumplan con sus obligaciones.

“Los maestros y maestras tienen que ver cómo han dosificado los contenidos, y ese tema de dosificación tiene que pasar por el control del director de la institución”, explicó.

La implementación de la educación a distancia comenzó el lunes 9 de septiembre y se mantendrá hasta el viernes 13. Sin embargo, Roca indicó que la Dirección Departamental de Educación realizará una evaluación al término de este periodo para determinar si se prolonga la modalidad virtual o se regresa a las clases presenciales.

“Es sujeto a evaluación. Veremos si mantenemos o levantamos y volvemos a las actividades presenciales”, puntualizó.

Hasta el momento, no se han recibido informes concluyentes sobre las condiciones que permitan prever un retorno seguro a las aulas.

"No tenemos informes concisos que nos puedan servir para tomar decisiones en cuanto a la relación estudiante-maestro y el trabajo académico", afirmó el Director Distrital.

Este cambio de modalidad forma parte de las medidas adoptadas para enfrentar la emergencia ambiental en el Beni, donde la calidad del aire sigue siendo un tema preocupante para las autoridades y la población en general.