La obra que arrancará con su ejecución después de la fiesta de carnaval y cuyas obras complementarias en el lado boliviano le corresponden al gobierno nacional.

Justiniano señaló que recientemente se reunió con autoridades del Brasil, quienes le comunicaron que la licitación del 2023 aún está vigente, ya había una empresa adjudicada que incestaba montada en Guajara-mirim y que ya iban a contratar personal.

Esa adjudicación se anuló porque se presentó un recurso judicial donde se encontraron irregularidades, pero ahora se va a revisar todo el procedimiento para definir a la empresa que ganó dicha licitación.

Indicó que, las autoridades brasileñas le mencionaron que hay un tropiezo, porque no hay Embajador de Bolivia en Brasil, el que había renunció en diciembre del año pasado y solo estuvo cinco meses, y se necesita que por lo menos esté 2 años en el cargo.

"De acuerdo a las autoridades de Brasil, ese aspecto es muy importante, porque todo lo que haga Brasil con respecto a dicho puente, tiene que ser consultado con Bolivia al ser una obra binacional y ellos tienen que cumplir con la ley", dijo.

Mencionó que, ha enviado notas al Senado para pedir el nombramiento de un Embajador en Brasil, ha hablado con la Comisión de Política Internacional de la Asamblea Legislativa para nombrar al embajador luego de que el gobierno nacional envíe las carpetas con sus postulantes.

Según el embajador esa comisión se comprometió nombrarán al diplomático ni bien les llegue la nómina de postulantes y no perjudicar el inicio de construcción del puente binacional.

“Hasta ahora el gobierno nacional no envía su lista de postulantes, al parecer no le interesa el progreso del departamento del Beni”, lamentó el senador.

Explicó que las obras complementarias que le corresponde hacer a Bolivia no tiene un diseño final que sirva. El que se existe afecta a dos unidades educativas cercanas a la Cachuela Mamoré. Lamentó que hasta ahora el Ministerio de Obras Públicas no tenga nada concreto.