Según el subdirector de educación regular, Miguel Ángel Márquez Apaza, se han reportado numerosos casos de infecciones oculares, cutáneas, gástricas y, especialmente, respiratorias en las unidades educativas del departamento del Beni.

Ante esta situación, las autoridades educativas han implementado medidas de bioseguridad, como la identificación y cuidado especial de estudiantes con enfermedades preexistentes como el asma. Además, se ha establecido un protocolo para cambiar a clases virtuales en caso de que un número significativo de estudiantes en un aula se enferme.

Sin embargo, a pesar de la gravedad del problema, la mayoría de las unidades educativas continúan con las clases presenciales, aplicando medidas como la restricción de actividades al aire libre. Riberalta es la única región que ha optado por la modalidad virtual de manera generalizada.

La exposición prolongada a la contaminación del aire puede tener consecuencias graves para la salud de los estudiantes, afectando su desarrollo cognitivo y físico a largo plazo. Es fundamental que las autoridades educativas y de salud trabajen en conjunto para garantizar la seguridad y el bienestar de los estudiantes durante esta crisis ambiental.