Iténez: Caminos intransitables dejan sin alimentos y combustibles a la población
La provincia Iténez se encuentra en una situación crítica debido a la intransitabilidad de los caminos, lo que ha generado un desabastecimiento de gasolina, diésel, gas licuado de petróleo (GLP) y alimentos. Así lo informó el asambleísta departamental Juan Agreda, quien expresó su profunda preocupación por esta problemática.

"Cada día que pasa, los caminos de San Pedro, San Javier, La Palca, Santa Ana, San Ramón, Magdalena y Huacaraje están en peores condiciones. No hay mejoramiento, no hay una esperanza de que estos caminos se arreglen", manifestó Agreda, enfatizando la urgencia de una intervención por parte de las autoridades competentes.
El legislador hizo un llamado a la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC), recordando que ya se han enviado múltiples solicitudes junto a otros representantes institucionales del Beni. "Nuevamente pedimos, por lo menos, que la ABC ponga su buen oficio y considere que nosotros también merecemos un trato digno, un trato humano, porque es inhumano andar por esa carretera", expresó.
Agreda alertó sobre las consecuencias del deterioro vial, que impide el abastecimiento regular de productos básicos en poblaciones como Magdalena, Huacaraje y Baures. "No solo los alimentos están escaseando, sino que el combustible tampoco llega a tiempo. Es una situación muy preocupante para quienes vivimos en la provincia", señaló.
El asambleísta describió el calvario que enfrentan los transportistas y pobladores al intentar transitar por estas rutas en condiciones deplorables.
"No se puede llegar. Son por lo menos 24 horas bregando, arruinando la movilidad, sufriendo con el barro, los mosquitos, la sed y el hambre. Cuando no son 48 horas de viaje, los camiones tardan hasta una semana en llegar, y el camión gasero (GLP) incluso hasta cinco días para abastecer a la población", relató.
Además, destacó el impacto económico del problema, señalando que el encarecimiento de los productos de la canasta familiar es alarmante. "Estamos sintiendo una crisis tremenda. La gente está sobreviviendo como puede y, además, los productos llegan con un incremento de hasta el 100% en comparación con los precios en Trinidad", concluyó.