Eggers advirtió que la situación actual está poniendo en riesgo una industria que ha significado una inversión millonaria del Estado. “Se está poniendo en riesgo una industria que le ha costado al Estado cerca de 100 millones de bolivianos, específicamente 86 millones, si no me equivoco” , manifestó.

El dirigente del sector lechero también alertó sobre la disminución de productores activos. “De los 80 productores que antes entregaban su producción a la industria, hoy solo quedan 50. Muchos han optado por vender sus predios y dedicarse a otras actividades, ya que con este precio no es posible seguir produciendo”, explicó.

Los lecheros han solicitado una reunión con el gerente nacional de EBA, pero hasta el momento no han obtenido respuesta concreta. “Hemos enviado una carta al gerente de EBA para que se reúna con nosotros. Nos comunicó telefónicamente que estaba ocupado en inauguraciones de otras plantas y que recién mañana podría confirmar su asistencia”, indicó Eggers, quien espera que la autoridad atienda sus demandas.

Asimismo, cuestionó que el precio del litro de leche haya sido fijado sin la participación de los productores. “Fue determinado solo por el Ministerio de Desarrollo Productivo y el Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras, sin tomar en cuenta nuestra estructura de costos”, afirmó.

El sector también observará que en otras regiones del país los precios son más altos. “En algunos casos, los productores reciben hasta Bs 3,60 por litro, mientras que en Santa Cruz la industria privada ofrece bonificaciones por calidad, grasa y brucelosis”, detalló.

Finalmente, Eggers sostuvo que es necesario ajustar el precio de la leche a Bs 4,50 por litro para garantizar la sostenibilidad del sector. “Llevamos siete años con el precio congelado, mientras que nuestros costos siguen subiendo. Creemos justo que se haga una nivelación acorde con la realidad”, concluyó.