La estrategia fue definida en una reunión convocada por el Gran Cabildo Indigenal, que contó con la participación de la Policía, el Puesto Militar Naval e Intendencia Municipal. El encuentro se llevó a cabo en las instalaciones del Cabildo, donde las instituciones coordinaron esfuerzos para garantizar el orden y el respeto a las tradiciones religiosas.

El dispositivo de seguridad contempla el despliegue de todos los efectivos del Puesto Naval, 12 gendarmes municipales y personal de seguridad física que reforzará a la Policía. Cada entidad tendrá funciones específicas: la Policía estará a cargo del cierre de calles y control vehicular, la Intendencia controlará la venta de alimentos y bebidas en la plaza 31 de Julio —habilitando una zona alterna para los comerciantes—, y la Naval asumirá patrullajes durante las procesiones.

“Estamos muy agradecidos por el apoyo de nuestras autoridades. Lo que buscamos es el respeto a nuestras expresiones religiosas, a las mamitas abadesas, los sargentos judíos y al Coro Musical, especialmente durante su traslado a la iglesia y en las procesiones, porque es muy sagrado para nosotros y para todo el pueblo”, expresó, a Mojosconecta, el corregidor Gregorio Nuni.

El intendente municipal, Dustin Maleca, detalló que las calles Ballivián, Bolívar, Montes, Santisteban y parte de la avenida Alfonso Elorriaga serán cerradas al tránsito vehicular el Jueves y Viernes Santo a partir de las 15:00, hasta la conclusión de las actividades religiosas.

Por su parte, el comandante policial, subteniente Víctor Borda, aseguró que todos sus efectivos estarán desplegados durante los días santos. “Vamos a estar con todo nuestro personal, trabajando en coordinación con la Naval y la Intendencia”, afirmó.

Además, la Policía y la Intendencia realizarán operativos conjuntos de control en bares, cantinas y licorerías para hacer cumplir la normativa vigente.

Con este plan en marcha, la población ignaciana se prepara para vivir con fe y orden la conmemoración de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo.