"Comunidades del norte del departamento, en las provincias Iténez y Moxos, de los 18 pueblos, se vieron afectadas con casas quemadas, producción agrícola destruida, niños y mujeres enfermos, entre otras secuelas de las quemas", precisó.

Indicó que, por ello, se están presentando en las entidades del Estado en las tres instancias de gobierno para que se ejecute de inmediato un plan de recuperación.

Consideró que la prioridad número uno es aprobar proyectos productivos que garanticen un sustento económico, ya que se perdió casi todo con las quemas y la sequía que sigue agobiando a los pueblos indígenas.

Remarcó que, asimismo, es fundamental ejecutar un plan de mitigación de enfermedades en las comunidades, ya que las infecciones respiratorias, gástricas, oculares y otras afectaron principalmente a niños, mujeres y personas de la tercera edad.

Subrayó que se busca generar instancias de mayor control para la protección de la flora y fauna, que fue diezmada por las quemas, ya que los animales silvestres, que son sustento también de los indígenas, fueron destruidos.

Demandó que se apruebe, a nivel edil y departamental, la perforación de pozos de agua para la dotación del líquido elemento, con garantías tanto para el consumo como para la producción.

Aseveró que se busca que se aprueben proyectos de vivienda, ya que son decenas de casas las que se quemaron en las comunidades indígenas.

Señaló que apuntan a la aprobación de programas y proyectos en ganadería, producción agrícola, artesanía y otros que logren beneficiar la mano de obra y la productividad de las comunidades originarias, que están afectadas por estas quemas".