Muchos líderes de opinión, autoridades y políticos coinciden en denominar esta fiesta como una de reconciliación y re encuentro, de paz y amor, a pesar de los tiempos difíciles, este día, es un día de regocijo y celebración.

“La navidad hermosa, dice una canción, la navidad hermosa es una fiesta de todo el cristianismo, porque experimenta en su vida, el nacimiento del hijo de Dios, nos hemos preparado durante el tiempo de adviento para este momento de recibir el nacimiento del hijo de dios, el cumplimiento de esta promesa (…) que la navidad nos ayude a renacer en la fe, en nuestro compromiso, en nuestro testimonio, en todo aquello bueno que Dios quiera que hagamos nosotros, que la navidad fortalezca todo aquello bueno que hay en el corazón”, declaró el monseñor Aurelio Pesoa Ribera, obispo del Vicariato Apostólico del Beni.

Con entrega de regalos para los niños, el alcalde de la ciudad se sumó al espíritu navideño, voluntarios de todas las edades colaboraron con el asilo de ancianos y el comedor de personas de la tercera edad en la parroquia de la Santa Cruz, el Rector de la Universidad Autónoma del Beni (UAB), también llegó obsequios a los pequeños de barrios periurbanos.

Trinidad demostró que, sin importar los tiempos difíciles, es solidaria, amorosa, calidad y sus ciudadanos, más allá de todo, son capaces de fundirse en un abrazo honesto y de reconciliación.

La paz de la navidad permitirá vivir horas de alegría al pueblo de la capital, que demostró este año más que en otras ocasiones, un gran espíritu de resiliencia.