El mandatario, junto con parte de sus colaboradores, se trasladó hasta la localidad de Apacheta, donde inicio al ingreso de cientos de cisternas que transportan combustible hacia el país. 

Paz aseguró que, gracias a gestiones internacionales, la colaboración de gobiernos amigos, instituciones multilaterales y empresas privadas, Bolivia contará con el abastecimiento de gasolina y diésel a partir del 8 de este mes. La medida busca estabilizar el suministro y reactivar la economía nacional.

“Nos hemos comprometido, como hemos hecho, a sacar adelante a Bolivia, estabilizarla y tomar decisiones, algunas no fáciles, para reactivar la economía con una visión de Bolivia en el mundo y el mundo en Bolivia”, señaló Paz durante la llega de los primeros camiones cisterna.

El mandatario destacó cinco ejes de su gestión: promover un capitalismo inclusivo, eliminar lo que denominó “Estado Tranca”, garantizar gasolina para la población, asegurar recursos para el desarrollo regional y mantener la lucha contra la corrupción.

En un acto simbólico, Paz levantó la tranca en la carretera hacia La Paz, dando paso a la caravana de cisternas que transportará combustible hacia la planta de Senkata, un total de 10 vehículos inicialmente. “Aquí está la imagen del presidente levantando la tranca… ¡Adiós Estado Tranca!”, enfatizó.

El ministro de Hidrocarburos, Mauricio Medinacelli, informó que la llegada de decenas de cisternas de diésel y gasolina busca estabilizar el mercado y garantizar que los bolivianos puedan abastecerse sin largas filas en las estaciones de servicio.

“Este es el resultado de un trabajo previo para estabilizar el mercado. La idea es incrementar la oferta progresivamente, hasta un 40 % respecto a lo que se tenía antes, para que la gente ya no haga colas”, explicó. 
Según el ministro, en los próximos días se espera la llegada de un total de 900 cisternas, incluyendo envíos recientes desde Villa Montes y otros puntos del país.