Esta situación genera serios problemas para las comunidades asentadas en las riberas, afectando la economía local, especialmente en el sector ganadero.

“Estamos atravesando momentos difíciles. Primero, los incendios destruyeron parte de nuestro territorio, y ahora la sequía y la posibilidad de inundaciones ponen en peligro a nuestras comunidades”, expresó Guzmán.

Subrayó que la falta de recursos y el limitado apoyo de las autoridades han agravado la situación. “El deterioro de las condiciones y las pérdidas en el sector ganadero nos han golpeado fuertemente”, añadió.

Guzmán destacó la urgencia de organizar reuniones con las autoridades pertinentes y presentar un informe detallado de las necesidades y daños sufridos.

“Es crucial que se conozca nuestra situación para recibir la atención necesaria. También estamos considerando contactar a los medios de comunicación para amplificar nuestro mensaje y buscar apoyo a nivel departamental y nacional”, concluyó Guzmán.

Puerto Siles, conocido por su actividad ganadera, busca soluciones para mitigar los efectos de estos desafíos y proteger a sus habitantes y su economía.