Trinidad no es solo un punto en el mapa, es un símbolo de resistencia, de riqueza cultural, de raíces indígenas y misionales que se entrelazan con el futuro que juntos estamos construyendo. Desde sus inicios como misión jesuítica hasta convertirse en capital del departamento del Beni, nuestra ciudad ha sabido conservar su esencia y al mismo tiempo proyectarse hacia el desarrollo.

Como mujer beniana como servidora pública y como madre, me llena de orgullo poder aportar a este crecimiento desde el Concejo Municipal. He aprendido que servir no es solo legislar, sino también escuchar, acompañar y devolver a nuestra ciudad lo mucho que nos da.

Hoy, en el marco de este aniversario tan especial, quiero hacer un regalo simbólico pero lleno de amor y compromiso, el Himno a la Santísima Trinidad, Esta obra es un canto al alma de nuestra ciudad; en cada verso se siente el amor por su historia, el respeto por sus tradiciones y la esperanza en su porvenir.

Querido pueblo trinitario: celebremos con alegría estos 339 años de vida. Sigamos trabajando juntos, con fe, con unidad, con visión, para que Trinidad continúe siendo tierra de oportunidades, de cultura viva y de paz.

¡Feliz aniversario, Santísima Trinidad!

¡Que viva nuestra ciudad!

¡Que viva su gente!

¡Y que viva por siempre el espíritu de esta tierra bendita!

Muchas gracias.