El Ministerio Público estableció que el efectivo militar es el presunto autor de los delitos de vejaciones y torturas, lesiones graves y leves y coacción en contra de soldados del Regimiento Militar asentado en la comunidad de Casarabe.

"El juez ha ordenado detención preventiva del imputado por el plazo de 90 días, una decisión que como Ministerio Público no la compartimos respecto al plazo, debido a que el juez no ha valorado todos los elementos y no acreditó el delito de vejámenes y torturas, por el contrario solamente acreditó el delito de lesiones, por lo que el Ministerio Público apeló a esa decisión", aseguró Balderas.

ANTECEDENTES

Un grupo de padres de familia presentó la denuncia por presuntos maltratos físicos y psicológicos sufridos por los soldados que prestan su servicio militar en la comunidad de Casarabe. Lo más alarmante es que entre las supuestas víctimas se encontrarían dos menores de edad.

Según la denuncia formal enviada al comandante de la unidad militar, los conscriptos habrían sido golpeados con cables y palos, además de ser sometidos a vejaciones, como ser atados junto a serpientes que el sargento Cristian Freddy Paredes Quispe —señalado como responsable— tenía como mascotas.

También se menciona que el militar exigía pagos de 50 bolivianos a los soldados para permitirles salir de franco y que aquellos que no cumplían eran castigados físicamente, según reportó Termómetro Noticias.

Los padres también denunciaron que han sido intimidados para que desistan de la acusación y que sus hijos han sido aislados en otro ambiente dentro de la unidad militar. Ante esta situación, exigen la destitución del sargento y la apertura de un proceso en la justicia militar.

El sargento Paredes Quispe fue aprehendido por la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (Felcv).