El evento, caracterizado por la energía y pasión tanto de los jinetes como del público, logró reunir a una gran cantidad de asistentes locales, además de visitantes provenientes de Rurrenabaque, Santa Rosa y otros municipios vecinos. Cada galope estremeció las tribunas, mientras los espectadores celebraban con entusiasmo el esfuerzo y la destreza de los competidores.

Estas carreras no solo reflejan la habilidad de los jinetes y la fuerza de los caballos, sino también la importancia de mantener vivas las tradiciones culturales que han perdurado a lo largo de los años en la región.

Paralelamente, el estadio Selim Simón fue escenario de un cuadrangular de fútbol, donde los equipos locales mostraron su talento y pasión por el deporte, complementando así la oferta deportiva de esta importante festividad.

La Fiesta de los Santos Reyes no solo celebra la fe y la historia, sino que también representa un punto de encuentro donde las generaciones se unen para compartir la alegría, la tradición y el orgullo de sus raíces.