Contento por un lado, por el avance y obras en la Capital, casi una docena de Megavias y una ciudad rumbo a quedar expedita en 20 minutos después de la lluvia… un sinfín de gestiones productivas y de alcance ciudadano.

Sin embargo, no quita el agrio límite con el que chocan los sueños, llamémosle Concejo, hoy, antes y mañana.

Aquel Concejo que no permitió agradecer, reconocer, destacar y preservar en vida a quienes nos enseñaron a amar lo nuestro, a quienes abrieron un camino y un destino para el arte y la expresión, quienes son cultura viva.

Perdimos la oportunidad de terminar de engalanar nuestro 183 aniversario, con la inédita distinción de Tesoro Humano Viviente a José Enrique “Pepe” Villar Suárez, Yuly (Yulita) Natusch Henrich, María Esther “Tonchi” Shiriqui de Yáñez, Selva Libertad “Fanty” Velarde Hurtado, Arnaldo Mejía Méndez y Zoilo Salces Paz ¿por qué?

Un legislativo flojo quizá, con alguna fuerte diferencia cultural para qué ¿¡ellos consideren que estos hombres y mujeres no merezcan ese título!? o simplemente, la falta de amor a Trinidad.

Irónico, pese al discurso que siempre pregonan, desmentido ahora gracias a esta dolosa acción contra el pueblo trinitario, contra su memoria, contra su verdad.

Revindiquemos a estos grandes, a nuestra cultura viva, a su legado.

Concejo, apruebe nuestras leyes.